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El poder de los granos de arena | Parte 1 | Entrega 18

clubdeloscuerdos

Bogotá

Domingo 26 Julio 2020

Pintura de Dalí, contribución de Stella Feferbaum

Texto que acompaña la FOTO


Yo tenía diez años cuando vi por primera vez las palabras en los Evangelios según las cuales: “Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que el que un rico entre en el Reino de los Cielos”.

Mateo 19: 23-30.


Me quedé pensando y lo primero que se me ocurrió fue que no decía que era imposible que un rico entrara en el Reino de los Cielos, sino que no era fácil. “Claro”, pensé, “en teoría se podría convertir un camello en un larguísimo hilo que pasara por el ojo de una aguja, o se podría hacer una aguja tan grande que por el ojo pudiera pasar cualquier camello. Pero no sería fácil”.

En esta hermosa pintura de Dalí ahora veo plasmada esa idea.

Años más tarde, en mis estudios de psicología sistémica me encontré con que el psicólogo Alfred Adler decía que entre un niño maltratado y un niño sobreprotegido, criado en el exceso y abundancia, tenía más posibilidades en la vida el primero porque por lo menos contaba con un principio de realidad: el maltrato era algo feo, malo que no le gustaba. En cambio el segundo crecía pensando que era un dios que todo lo merecía. Y, como decían mis tías: “Es mejor educar en la casa porque el mundo educa a patadas”.

Cuando leí a Adler, recordé al camello y el ojo de la aguja.

Hay que saber sin embargo que, como dice Javier López:

“Es preciso aclarar antes que nada que Jesús nunca condenó la riqueza ni los bienes en sí mismos. Lo que condena son las personas cuyo único interés es acumular bienes y dinero para su propia satisfacción, no teniendo presente las necesidades del mundo”. Entre los amigos de Jesús

estaban hombres ricos como José de Arimatea y Zaqueo, y su primer milagro se dio en una rumba de una boda en la que se había acabado el vino.

Lo cierto es que, como también dice el Evangelio: “Donde está tu tesoro, allí estará tu corazón”. Mateo 6: 19-21.


PAPELITOS DE COLORES


1. “Cualquiera sabe ganar, pero el hombre donde se ve es cuando pierde”.

Canto Flamenco


2. “La victoria tiene cien padres, y la derrota es huérfana”.

John F. Kennedy


3. “La mente es como un paracaídas. Sólo funciona si se abre”.

Albert Einstein


4. “Confía en Dios, pero cierra bien tu casa al salir”.

Cuento indio


5. “La paz no puede existir sin justicia”.

Dom Helder Cámara, obisbo brasileño


6. “Mi conciencia tiene para mí más peso que la opinión de todo el mundo”.

Marco Tulio Cicerón


7. “El mejor sermón es el buen ejemplo”.

Benjamin Franklin


8. “Predica siempre. Usa palabras sólo cuando sea estrictamente necesario”.

San Francisco de Asís


9. “Mas ser ke pareser”.

Refrán en Ladino


10. “La profundidad se va alcanzando con la vida y sus años, no con la acumulación de información”.

De Mis Pensamientos en el Camino


11. “La sabiduría siempre es inteligente, pero la inteligencia rara vez es sabia”.

De Mis Pensamientos en el Camino


12. “La diferencia entre el héroe y el cobarde es que los cobardes actúan por sus miedos; los héroes actúan a pesar de sus miedos”.

Los Monjes de New Skete

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